
El abordar cualquier proyecto documental resulta un reto. A la responsabilidad de contar una historia y hacerlo de forma amena se suma la incertidumbre del clima que se generará con la persona o personas que participarán como protagonistas.
A esta inquietud y a esta responsabilidad se suma la necesidad de contar a futuros visitantes como es una producción agroalimentaria claramente estacional, permitiendo desarrollar una experiencia turística sin necesidad de interferir en su proceso de producción.
A La Zalea llegamos tras el buen sabor de boca de las grabaciones realizadas en el resto de empresas agroalimentarias de Serón susceptibles de ser visitadas. Con el corto documental de Almazara La Zalea se alcanzan los cien minutos de producción, complementando y mejorando la experiencia de las personas que visiten Serón para hacer turismo gastronómico, también turismo agroindustrial.
Tras citarnos en las instalaciones de la almazara, nos acompañó Luis Segura Borja, propietario de Jamones Segura y también de Almazara la Zalea. Como en el resto de experiencias documentadas, su afabilidad y hospitalidad hicieron más fácil el trabajo, desarrollado a lo largo de toda la jornada.
El relato, fluido y repleto de elementos que nos permiten comprender la cultura del aceite, hizo énfasis en dos planos distintos: la finca La Zalea y la almazara del mismo nombre.
El origen ganadero de la finca, la planificación de la plantación, la importancia de la producción integrada o del sistema de riego por gravedad son aspectos explicados por Luis Segura Borja. También la importancia de la recolección temprana al vuelo, en ese punto en el que la aceituna se encuentra entre verde y morada, definición de una palabra tan bonita como es envero.
Antes de pasar a la almazara, situada a poca distancia, facilitando con ello la organización de la visita, a Luis Segura Borja le brillan los ojos al referirse a los animales de la finca, esos que abonan y que actúan como otro agente integrado en esta producción. Es esta una oportunidad para hacer ver como las manifestaciones de la cultura empresarial también son visibles en empresas agroalimentarias, natural y serenamente.
En la almazara, la aceituna recogida al vuelo de los olivos apenas una hora antes, entra en un proceso continuo que prescinde de lavado (salvo en casos extraordinarios) y que emplea maquinaria de última generación, apostando en todo momento por la sostenibilidad.
Como fin del proceso mana un hilo continuo de aceite de oliva denso y verde, permitiendo a Almazara La Zalea competir con los mejores AOVE de Andalucía.
La entrevista se realiza al caer la tarde, entre los olivos de La Zalea, con Serón al fondo. Como colofón a un día en el que de forma afable, hospitalaria y serena Luis Segura nos mostró los secretos de La Zalea (finca y almazara), brindándonos la posibilidad de producir un documental de unos veinte minutos del que este microdocumental sirve como avance.
Tras producir el documental resulta evidente la posibilidad de la experiencia turística, amplificada por la interpretación de Luis Segura Borja, otra posibilidad más en el marco de la Estrategia Turismo de Serón. Almazara La Zalea